El paradigma conductista nació en en la década de 1930 a partir de numerosas investigaciones básicas. Se desarrolló durante las dos décadas siguientes y a partir de los años sesentas inicio sistemáticamente su *huida del laboratorio*.
Ha concentrado sus propuesta de aplicación en el llamado análisis conductual aplicado a la educación, que sostiene que los escenarios sociales son un campo de aplicación de los principios obtenidos por la investigación fundamental en escenarios artificiales validos para todas las situaciones y escenarios y se seleccionan y utilizan en distintas situaciones y problemáticas educativas.
Se originó en el siglo XX, con J.B. Watson como fundador; con su programa: la psicología desde el punto de vista de un conductista.
De acuerdo con Watson, tenía que olvidarse del estudio de la conciencia y los procesos mentales (inobservables) y, nombrar a la conducta (procesos observables) su objeto de estudio; rechazando así el uso del método subjetivo para, utilizar en su lugar, métodos objetivos (véase Rubinstein 1974) .